El desbordamiento de un río en Manaos como consecuencia de las torrenciales lluvias que azotan la región, inundó un campamento de refugiados venezolanos, arrastró las carpas y dejó un saldo de tres heridos.

El centro de atención y reubicación de migrantes venezolanos en Manaos fue cerrado indefinidamente, tras el desbordamiento del río Negro.

El teniente de bomberos Paulo Galeano informó que la fuerza del agua logró derribar un muro y arrastrar las carpas del refugio, llevándose a su vez las pertenencias y documentos de los migrantes.

De acuerdo con el reporte, más de 40 familias fueron afectadas y al menos tres personas resultaron heridas, mientras que ocho fueron trasladas a centros médicos, entre ellas una mujer embarazada y un bebé.

El torrente derribó la estructura del techo del refugio y la pared del perímetro  y hasta el momento no se reportan fallecidos.

Redacción/ Edición: PabVen/ Con información y foto: RR.SS