El Tribunal Superior de Londres no necesitó mucho esfuerzo para reconocer que Guaidó es el presidente legítimo de Venezuela y, en consecuencia, con todas las de la Ley para disponer de las reservas de oro venezolano depositadas por Maduro en el Banco de Inglaterra.

Una pieza maestra del flemático humor inglés: Los bancos sonríen a Maduro, le abren las bóvedas y recibe a resguardo el oro de los venezolanos. En el segundo acto, aparece una corte inglesa con el veredicto del juez que le arrebata los lingotes al cuestionado mandatario y los entrega al interino.

-Mr Nicolás, ¡I´m sorry!

Pobre Cilia, el mandatario marxista, enemigo medular de las monarquías, estará con un humor de perro por la sentencia del juez Justice Teare : “El gobierno de Su Majestad ha reconocido inequívocamente a Guaidó como presidente de Venezuela”

Al régimen socialista se le escapan de la mano unos 1.100 millones de dólares en oro almacenado en las bóvedas del primer banco inglés, un tesoro clave para mantener el poder,en momentos en que el maná petrolero desciende a niveles del año 1943, cuando se extraía con recursos elementales.

El Banco Central de Venezuela había intentado mover el oro depositado con el pretexto de invertirlo contra la pandemia y el hambre, pero los ingleses dudaron y endosaron su destino a la Justicia.

Le entregó a Guaidó y la junta “ad hoc” el control, no solo de las 30 toneladas de oro que aún se encuentran dentro del Banco de Inglaterra, sino también más de US$ 120 millones de un contrato de intercambio de oro negociado con el Deutsche Bank.

Bajo el amparo del criollo derecho a pataleo, el presidente del Banco Central de Venezuela, Calixto Ortega, calificó el fallo como “insatisfactorio” y apelará, a pesar del microscópico margen de posibilidades para revertir la decisión.

La sentencia se traduce en un fuerte respaldo a Guaidó y su gobierno interino frente a la dictadura de Maduro, cada día más aislada internacionalmente. Resulta oportuna en momentos en que desciende el nivel de aprobación del presidente interino.

Como paradoja, el Gobierno británico reconoce a Guaidó como “presidente interino constitucional hasta que se celebren elecciones”, pero en la práctica “mantiene lazos diplomáticos” con el Ejecutivo de Maduro, aunque no lo apruebe.

La decisión del juez Justice Teare era previsible. Debía seguir la línea de reconocimiento de Boris Johnson a Guaidó, con base en la doctrina de “una sola voz” del Reino Unido, que obliga a las instituciones del Estado a mantener una posición unificada en política exterior.

Redacción/Edición: PabVen/Fuente: Efe/Foto: Cortesía Revista Noticias