El alarmante nivel de desnutrición de los niños venezolanos repica de nuevo como campanada de alerta a la comunidad internacional.

La Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) advirtió que 30% de los venezolanos menores de 5 años padecen de desnutrición crónica. En lenguaje coloquial, “se mueren de hambre”.

La cifra es parte de los 132 millones de infantes hambrientos que la crisis sumará este año a las estadísticas globales de la desnutrición entre la población más vulnerable.

La FAO advierte que uno de los países más afectados es Venezuela, donde los niveles de nutrición de los niños menores de cinco años ya son comparables con los de los países más pobres del planeta.

A la campanada de la FAO siguió la de la organización humanitaria británica Oxfam, la cual publicó una alerta sobre «el virus del hambre» en la que Venezuela figura como uno de los diez principales «puntos críticos».

Recordó Oxfam que incluso antes de la pandemia, más de la mitad de la gente con hambre en América Latina ya vivía en Venezuela.

Para la organización humanitaria inglesa, hay evidencia de que un número cada vez mayor de venezolanos reduce sustancialmente la cantidad y calidad de la comida de su dieta. Venezuela transitó de los tres platos diarios hasta dos, e inclusive uno al día.

Estiman que para finales de año, unas 12.000 personas podrían morir a diario por hambre, vinculado a la covid-19 en todo el mundo, es decir más que los que morirán por la pandemia.

Solo Yemen, República Democrática del Congo y Afganistán superan los 9,3 millones de hambrientos que la ONG británica estima que tiene Venezuela.

La carta del hambre en el mundo:

• Yemen: 15,9 millones (53% de la población)
• República Democrática del Congo: 15,6 millones (26%)
• Afganistán: 11,3 millones (37%)
• Venezuela: 9,3 millones (33%)
• Haití: 3,7 millones (35%)

Según mediciones de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), menos de uno de cada 10 hogares del país (7%) está libre de inseguridad alimentaria, una cifra que podría reducirse al 3% como resultado de la pandemia:

• Nueve de cada 10 hogares venezolanos (96%) presenta pobreza de ingresos.
• Los bonos y cajas CLAP vendidos por el gobierno no solucionan el problema alimentario.
• El costo de una dieta saludable es de US$3,98 al día por persona, lejos del alcance de la mayoría de los venezolanos.
• Reemplazo de carne, lácteos y verduras de la dieta por alimentos más baratos, como los cereales.
• Promedio global de consumo de proteínas de 24 gramos diarios, por debajo del promedio mínimo de 51 gramos

En un país donde 8 de cada 10 niños lloran por hambre antes de irse a la cama; donde la pandemia cerró la válvula de escape de la migración y dos millones de personas dependen de las remesas para sobrevivir, el panorama luce apocalíptico. No solo ahora sino a futuro, por las secuelas irreversibles que dejará en las próximas generaciones.

Redacción/Edición: PabVen/ Fuente: BBC/ Foto: Cortesía Youtube