Estados Unidos sancionó al presidente del Tribunal Supremo de Justicia chavista, MaIkel Moreno y ofreció 5 millones de dólares por información que lleve a su arresto.
El secretario de Estado Mike Pompeo dijo que se trata de un lacayo de Maduro que usó su posición de autoridad para obtener beneficios personales y aceptó sobornos para influir en el resultado de causas criminales en Venezuela.
Subrayó que la sanción envía un claro mensaje: los Estados Unidos se oponen firmemente a la corrupción.
El departamento de Estado publicó un comunicado en el que Pompeo indica que la recompensa está enmarcada En el Programa contra el Crimen Organizado Transnacional.
Moreno, ex agente de inteligencia, abogado, y detenido un tiempo por el asesinato de un adolescente, ostenta su puesto desde 2014.
Es una figura muy cercana a Maduro y fue uno de los autores intelectuales de maniobras como la declaración de desacato de la Asamblea Nacional, que la vació de poder real declarando como nulos todos sus actos.
A cargo de la Sala de Casación ratificó la condena a 14 años de prisión contra Leopoldo López por las protestas contra Maduro en todo el país en 2014, durante las cuales el régimen ejecutó a 41 ciudadanos.
Moreno tiene varias sanciones de Estados unidos en su haber. La primera, como consecuencia del fallo concerniente al “desacato” del órgano legislativo venezolano.
Por esa razón, junto a otros siete miembros del TSJ chavista, en 2017 congelaron sus activos en el país norteamericano y se les prohibió hacer transacciones.
En marzo, se incluyó en la lista de 14 funcionarios del régimen acusados formalmente de narcoterrorismo por el departamento de Justicia.
La cara de Moreno apareció en uno de los recuadros más prominentes, a la izquierda de Maduro y segundo en importancia junto al ministro de Defensa, Vladimir Padrino López.
Redacción/Edición: PabVen/ Fuente y Foto: Reuters
