La tormenta biológica perfecta por coronavirus estaría a punto de desatarse sobre Venezuela, a decir de la dramática exhortación a la ONU, por parte de Human Rights Watch y los Centros de Salud Pública y Derechos Humanos de la Universidad Johns Hopkins

El llamado de alarma incluye a los gobiernos miembros y les exige que financien las iniciativas de la organización para atender la crisis humanitaria en la nación sudamericana.

La advertencia se sustenta en la realidad innegable de un sistema de salud que colapsó por escasez de medicamentos e insumos, interrupción del suministro de servicios públicos básicos como el agua y la emigración de trabajadores sanitarios.

En el núcleo de la tormenta se encuentra el caos del transporte interno de personal e insumos por la incipiente falta de combustible. El gobierno del cuestionado presidente Maduro se cobija con la llegada de 5 cisternas iraníes, considerados por los analistas como un paliativo de corto efecto u otro emprendimiento lucrativo de la cúpula militar.

Lo que sí queda al descubierto, es que los conductores del país con las mayores reservas petroleras del mundo adolecen de una “absoluta falta de preparación” para hacer frente al COVID-19, según el texto.

-Venezuela -refieren-  ha registrado 1.211 contagios y sólo 11 fallecidos. Es muy probable que la tasa de mortalidad termine siendo mayor a la media estadística, ya que no hay capacidad para brindar atención de alta complejidad.

El hacinamiento en zonas populares y cárceles, así como los problemas generalizados para acceder al agua, determinarían que el nuevo coronavirus se extienda con una rapidez exponencial.

El documento de HRW y la Universidad Johns Hopkins propone que António Guterres, y Mark Lowcock exijan a Nicolás Maduro que adopte todas las medidas necesarias para que la ayuda humanitaria llegue a los venezolanos.

Ante la tormenta que se cierne sobre Venezuela, plantean  que los gobiernos preocupados por tan crítica situación “despoliticen la asistencia humanitaria” y que Estados Unidos asegure que las sanciones vigentes no agraven la crisis ni obstaculicen los esfuerzos humanitarios.

Redacción: PabVen/Fuente:Institucional/Foto Referencial: Cortesía DiarioLasAméricas